En ese marco, la ministra de Educación, Isolda Calsina, sostuvo que esta nueva modalidad “genera muchos desafíos”, tanto desde el abordaje como desde su implementación, por lo que “hemos construido una agenda completa integrada junto a los sectores convocados para trabajar de manera organizada y conjunta sobre este nuevo desafío”.

Explicó que el objetivo principal de estas mesas de trabajo es “construir respuestas y propuestas conjuntas”, por lo que enfatizó la prioridad en “cuidar a todas las personas durante este proceso”, por lo cual aseguró que “tenemos diseñado un importante protocolo de bioseguridad y prevención para eso”.

Indicó que lo que se busca con el regreso a las aulas, de manera paulatina, es el “aprendizaje y fortalecimiento de los mismos”, destacando en este sentido “la predisposición y aporte de ideas innovadoras y creativas para avanzar con estas medidas”.

Sobre la importancia de ser la primera provincia que posibilita el regreso a las aulas, merced de las eficaces políticas públicas de prevención del COVID-19, sostuvo que “estamos construyendo camino al andar porque no hay antecedentes sobre esta modalidad”, por lo que “estamos cuidando todos los detalles, procurando promover las medidas de bioseguridad que demanda esta situación”.

Manifestó que, este regreso a las aulas, de manera opcional para quienes quieran concurrir, va a ser un complemento a la educación virtual, la cual se viene desarrollando de manera óptima, destacando el carácter de “refuerzo que brindamos desde el Estado para que todos los estudiantes transiten mejor el aprendizaje en casa”.

Finalmente, hizo especial énfasis en “mantener la tranquilidad sanitaria en la provincia”, por lo que ratificó los trabajos minuciosos que se están realizando en materia sanitaria y de prevención “para garantizar la salud integral de los estudiantes y todo el personal de los establecimientos educativos”, a partir de un detallado protocolo, el cual ya fue presentado al COE para su evaluación y aprobación.