El presidente Javier Milei autorizó un anticipo financiero de $120.000 millones para la provincia de Chaco, que serán utilizados por Leandro Zdero para cubrir gastos urgentes y amortizar deudas. La medida quedó oficializada a través del decreto 190/2025, publicado este lunes en el Boletín Oficial, y establece que los fondos deberán ser devueltos mediante retenciones automáticas de la coparticipación.
La decisión responde a la imposibilidad del gobierno chaqueño de afrontar sus obligaciones en el corto plazo. Según el decreto, la provincia "se ve impedida, en forma transitoria, de atender financieramente" ciertos compromisos, por lo que resulta necesario proporcionar "soluciones inmediatas a las dificultades financieras".
El otorgamiento de estos fondos se da en un contexto marcado por la continuidad del ajuste por parte de la Casa Rosada, pero también por el reciente acuerdo electoral entre La Libertad Avanza y el radicalismo chaqueño, que participarán de un mismo frente en las elecciones de este año.
Un alivio financiero en medio de la crisis en Chaco
Chaco enfrenta dificultades económicas que afectan el normal funcionamiento del sector público. El anticipo financiero autorizado por el Ministerio de Economía que comanda Toto Caputo busca garantizar la continuidad de los servicios esenciales y la operatividad de la administración provincial.
El decreto establece que los fondos deberán ser reintegrados dentro del presente ejercicio fiscal y que el monto devengará intereses conforme a la Tasa Mayorista de Argentina (TAMAR). En caso de ser necesario, el Poder Ejecutivo podrá extender el plazo de devolución, pero siempre dentro del mismo año.
El mecanismo de devolución se realizará a través de retenciones automáticas de los recursos coparticipables que recibe Chaco. Según la normativa, estos fondos serán descontados en cuotas sobre el producido de los impuestos coparticipados, lo que significa que el Gobierno provincial verá reducidos sus ingresos en los próximos meses.
Las condiciones de devolución para el préstamo de Javier Milei
El decreto establece que el anticipo será registrado como parte de las erogaciones de la Tesorería General de la Nación y será gestionado bajo la órbita de la Subsecretaría de Presupuesto de la Secretaría de Hacienda. Además, la provincia deberá afectar parte de su participación en el Régimen Transitorio de Distribución de Recursos Fiscales entre la Nación y las Provincias para devolver el dinero adelantado.
El otorgamiento de anticipos financieros no es un mecanismo nuevo en la administración pública. En 2024, provincias como Tucumán y Río Negro recibieron asistencia bajo este sistema, aunque en montos menores. La Ley 11.672, Complementaria Permanente de Presupuesto, habilita al Ministerio de Economía a conceder estos anticipos en casos de dificultades transitorias de financiamiento.
No obstante, a diferencia de otras ocasiones, este anticipo financiero se enmarca en una política económica que busca reducir la asistencia discrecional a las provincias. La Casa Rosada asegura que este tipo de medidas serán excepcionales y que cada distrito deberá asumir su propia responsabilidad fiscal.
El acuerdo con Leandro Zdero antes del salvataje financiero
El anticipo financiero otorgado a Chaco coincide con un acercamiento político entre el gobernador Zdero y el oficialismo nacional. El pasado martes se confirmó un acuerdo entre La Libertad Avanza y el radicalismo chaqueño para participar juntos en las próximas elecciones.
El pacto alcanzado por Karina Milei y el propio Zdero prevé que ambas fuerzas compartan listas en los comicios legislativos provinciales de mayo, así como en las elecciones nacionales de octubre. Esta alianza representa un cambio de estrategia para la Casa Rosada, que hasta el momento había evitado acuerdos con otros espacios políticos.
En un contexto de mayor debilidad para el Gobierno, este tipo de alianzas podrían volverse más frecuentes. La negociación con Zdero fue encabezada por la secretaria general de la Presidencia y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. Según fuentes cercanas a la negociación, la intención es replicar este esquema en otras provincias donde el oficialismo necesita fortalecer su estructura política.
Un antecedente que puede marcar tendencia
La asistencia financiera a Chaco podría generar un efecto dominó en otras provincias que atraviesan dificultades económicas. En los últimos meses, varios distritos han solicitado ayuda a la Casa Rosada debido a la caída en la recaudación y la reducción de los fondos por coparticipación. De hecho, como contó este medio la semana pasada, La Pampa reclama a la Nación fondos adeudados por una cifra similar a la que percibió el Tesoro chaqueño: $115.000 millones. Sin embargo, pese a que la provincia patagónica firmó el “Plan Canje” que agitó Economía, el Régimen de Extinción de Obligaciones Recíprocas, Toto Caputo se autootorgó un plazo de un año más para afrontar los compromisos pendientes.
Gobernadores de distintas provincias han manifestado su preocupación por la falta de recursos y la imposibilidad de afrontar el pago de salarios y otros compromisos. En este sentido, el caso chaqueño sienta un precedente que podría abrir la puerta a nuevos pedidos de asistencia financiera.
El Gobierno nacional deberá definir si mantiene su postura de asistencia excepcional o si flexibiliza su estrategia fiscal en función de las necesidades provinciales. Mientras tanto, el anticipo de $120.000 millones aprobado para Chaco marca un punto de inflexión en la relación entre la Casa Rosada y las provincias, en un año clave para la política y la economía del país.
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