En las últimas semanas aumentaron las expresiones, pedidos y reclamos de dirigentes kirchneristas para que el presidente Alberto Fernández indulte a exfuncionarios y miembros del Frente de Todos que estén detenidos por causas de corrupción. El argumento principal, siguiendo lo que marcó la vicepresidenta Cristina Kirchner, es que esto sería una solución política al “lawfare” . Este miércoles, el propio Alberto Fernández opinó en declaraciones radicales sobre estos pedidos y aseguró que no indultará a nadie en su Gobierno: “Hice campaña diciendo que no iba a hacer indultos y lo voy a cumplir. Es una rémora monárquica”.

En diálogo con Radio Con Vos, el Presidente descartó de plano este insistente clamor dentro de un sector importante del Frente de Todos, identificado principalmente con la vicepresidenta Cristina Kirchner, que en los últimos días se escuchó por la complicada situación judicial del exvicepresidente Amado Boudou. Hebe de Bonafini y el exministro de la Corte Suprema de Justicia, Eugenio Zaffaroni, entre otros, pidieron este beneficio para Bodou y la líder la Tupac Amaru, Milagro Sala. En este sentido y con la presión del kirchnerismo duro, Alberto Fernández remarcó que si bien la vicepresidenta, Cristina Kirchner, “sigue todos los temas”, quien toma las decisiones es él porque sabe “todo lo que pasa en el Gobierno”.