El ahora ex secretario de Asuntos Estratégicos es un hombre de confianza de Fernández, a tal punto que había sido propuesto por el Gobierno para disputarle la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a Mauricio Claver-Carone, el postulante propuesto por Donald Trump, quien finalmente se quedó con el puesto. La apuesta del Ejecutivo era intentar evitar que Washington logre establecer su influencia, tal como ocurre hoy con el FMI.

El intento fallido de la administración peronista cobra mayor relevancia ahora, considerando que Claver-Carone recientemente dijo que el BID no debería entregarle créditos a Argentina en su actual contexto de crisis. Igualmente, el BID acaba de aprobar un crédito de 1.140 millones de dólares para el país.

Por lo pronto, se desconoce cuál será el futuro de Béliz, un político con buena llegada a los mercados financieros de EE.UU.

Fuente: Ámbito.com