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Según adelantó un prestigioso canal de noticias, el contraalmirante Gabriel González, máxima autoridad de la sede de la Armada en la que se congregaron los familiares de los 44 tripulantes del navío perdido, solicitó que lo releven de su cargo.

La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), dependiente del Ministerio de Seguridad de la Nación, desarticuló una peligrosa organización criminal dedicada a ingresar ilegalmente medicamentos al país, adulterar fechas de vencimiento y troqueles, atentar contra la salud pública y defraudar al Estado con maniobras ilegales a través de recetas apócrifas.

El vocero de la fuerza negó que oculten información y subrayó que "ninguna unidad zarpa si no está en condiciones", en referencia a los rumores que trascendieron.

La medida alcanzará a ministros, secretarios, subsecretarios y personal con cargos políticos. También se reducirán un 20% las designaciones y habrá “retiros voluntarios”.