Al inicio de la audiencia, el Tribunal dio trámite al pedido de “suspensión del juicio a prueba” o “probation” formulado, los pasados días jueves 12 y viernes 13 del corriente mes, por los abogados defensores doctores Guillermo Toro, de Guerrero, y Fabián Terán, de Jaldín.

Al correr vista al representante del Ministerio Público de la Acusación, Dr. Marcelo Cuellar, éste rechazó la presentación realizada por la defensa técnica de las acusadas, por considerarlo una “actitud dilatoria e improcedente”, argumentando que, para las víctimas, fue vulnerado el derecho a la propiedad, a la integridad física y la libertad de expresión.

Posteriormente, el Tribunal compuesto por los jueces Mario Ramón Puig –presidente de trámite-, María Alejandra Tolaba y Antonio LLermanos –los dos últimos habilitados-, analizó el requerimiento de los abogados defensores; y resolvieron que el mismo era improcedente ya que, había sido solicitado previamente, en el año 2014, ante éste órgano colegiado, oportunidad en la que tampoco se le hizo lugar.

Ante ello, los defensores de las imputadas manifestaron su intención de presentar un recurso de casación por la negatividad del mismo, solicitando además la suspensión de las audiencias.

Cómo respuesta, el Tribunal les recordó que dicho recurso ya había sido también planteado con anterioridad ante el Superior Tribunal de Justicia, el que rechazo el mismo.

Seguidamente, se dio inicio a la audiencia de debate que había sido prevista, escuchándose la declaración de cinco personas, quienes contaron lo ocurrido el día 3 de agosto de 2012 en el barrio “Tupac Amaru”, en el sector de Alto Comedero de esta ciudad.

Finalizados los testimonios, el Tribunal ordenó oficiar al Departamento Médico del Poder Judicial para que verifique los motivos informados por el Servicio Penitenciario, por los cuales Milagro Sala no se presentó a brindar declaración testimonial  en la audiencia de hoy.

Luego, los jueces decidieron que hoy, 18 de octubre, a las 9 horas, se realizará una nueva audiencia.

Cabe recordar, que  Rosa Guerrero y Patricia Jaldín llegaron a juicio oral porque supuestamente habrían robado y dañado las cámaras de filmación del equipo de producción del programa del periodista Jorge Lanata, el que se encontraba en el barrio antes mencionado, tomando imágenes.

Los denunciantes, víctimas, Héctor David Santistebe – camarógrafo-,  Federico Gandolfi -  sonidista-,  y Rodrigo Sebastián Alegre –periodista-, empleados de ARTEAR Canal 13, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, prestaron declaración testimonial hoy, como así también el chofer del remis que los traslado hasta el lugar de los hechos y, por último, un oficial de la policía de provincia retirado, quien supuestamente se desempeñaba como Jefe de Seguridad de la organización social “Tupac Amaru”.