Mirta Guerrero, una de las 11 presas políticas de Gerardo Morales, fue operada por primera vez en agosto. Le practicaron una cirugía abdominal y le colocaron una malla interna. En el Penal de Alto Comedero Shakira no tuvo las condiciones adecuadas para cursar su post operatorio, obligándosela a practicar actividades físicas totalmente contraindicadas para ese período, lo que motivó una nueva intervención quirúrgica, que se realizó el pasado 11 de diciembre. En el penal, a días de la segunda intervención, Guerrero sufrió un accidente cuando se resbaló en el piso que dejaron mojado y cayó sobre su herida.

Ante la segunda operación, su defensa presentó un pedido de internación domiciliaria hasta que termine el post operatorio. La solicitud fue rechazada por el juez Jorge Zurueta. El abogado Facundo Vargas Duran presentó entonces una apelación el pasado 19 de diciembre pero la Cámara de Apelaciones, a pesar de tener 48 horas para resolver el recurso, no dio respuestas. La defensa presentó entonces un nuevo hábeas corpus ante la situación de denegación de justicia y en virtud del incidente que tuvo lugar en el penal. Según los últimos informes médicos la salud de Shakira se viene deteriorando cada vez mas por lo que sus abogados reclamaron su internación urgente en un centro privado para que pueda contar con la atención médica adecuada y contención familiar, ya que de no frenar esa infección corre peligro su vida.