Gimnasia y Esgrima de Jujuy se sumó a la conmemoración y recordó a una de sus figuras emblemáticas: Ernesto David "Ranga" Rojas, futbolista del club y víctima de la represión.

La historia de Ernesto David Rojas

Como cualquier delantero, Ernesto Rojas soñaba fintas a arqueros y goles sobre su almohada en San Salvador de Jujuy. Esos sueños se convirtieron en realidad a sus 24 años. En 1970, Ranga, como lo apodaban sus amigos, cumplió su anhelo y quedó en la historia de Gimnasia de Jujuy al marcar un tanto en un partido trascendental ante Patronato, que le permitió al Lobo del norte obtener el Regional y lograr una plaza en el Nacional.

Ranguita disputó el primer partido de la historia de Gimnasia en un torneo de AFA, justo en la Bombonera, donde Boca venció por 3 a 1. En total, el wing izquierdo jugó 10 encuentros en el Lobo. Luego, Rojas partió a Tucumán para estudiar abogacía y se desempeñó en varios equipos de esta provincia: Central Norte, Atlético Tucumán y All Boys. Una lesión en su rodilla fue el principio del final.

Ranga quería operarse con el médico del plantel de Independiente, Miguel Fernández Schnoor. Conocía a los hermanos Arabel, Gerardo y Raúl, quienes estudiaban medicina en La Plata. Hacia allí viajaron desde Tucumán, Rojas con el objetivo de solucionar su rodilla y los hermanos para regresar a sus estudios. El 18 de marzo de 1976, seis días antes del golpe, los tres fueron secuestrados del departamento que habitaban en la calle 61 nº 229, donde también se encontraban dos compañeras de la Facultad que los criminales dejaron ir.

Ernesto Rojas no militaba. Sí lo hacían sus amigos. Ernesto Rojas estaba a punto de cumplir 30 años. Ernesto Rojas fue apenas uno de los tantos anticipos del horror que comenzaría a vivirse unos meses después. Ernesto Rojas fue acribillado y asesinado por represores. Ernesto Rojas no pudo ver al doctor Schnoor, tampoco recibirse de abogado. Esos sueños que tuvo de chico en Jujuy se desvanecieron, se esfumaron… Porque se los arrebataron ¡Nunca más!

Los tres aparecieron muertos en Ranelagh, partido de Berazategui. La Concentración Nacional Universitaria cometió el atroz crimen. La CNU fue una organización terrorista paraestatal, un preludio de la Triple A (alianza Anticomunista Argentina). Cerca apareció otro cadáver. Era de Eduardo Julio Giaccio, miembro de la comisión directiva gremial de los empleados del Hipódromo de La Plata, donde trabajaban los hermanos Arabel.

Con información de TyC Sports