Con la presencia de los acusados, el ex teniente primero de la Escuela de Suboficiales Sargento Cabral, Eduardo Alfonso, y del ex capitán del departamento de inteligencia del Comando de Institutos Militares, Rafael Félix López Fader, la audiencia comenzó en los tribunales ubicados en Pueyrredón 3728, en la ciudad bonaerense de San Martín pasadas las 10.

Ante un salón colmado y con fuerte presencia de camaradas del Ejército de los imputados, el tribunal integrado por Marta Milloc, Diego Barroetaveña y Marcela Rodríguez escuchó la lectura del auto de elevación a juicio. Seguidamente, López Fader brindó declaración indagatoria en la que negó los hechos de los que se le acusa y su participación en "la lucha contra la subversión".

El ex efectivo del Comando de Institutos Militares llegó a este juicio imputado por los delitos de privación ilegal de la libertad, tormentos y homicidio del ex diputado nacional del Partido Justicialista Diego Muñiz Barreto, y por el secuestro, torturas y la tentativa de homicidio de Juan José Fernández, ocurridos en 1977. El acusado solicitó al tribunal que le permita realizar un careo con un exmilitar, testigo de indentidad reservada en la causa.

Por su parte, Alfonso -quien estuvo prófugo en Paraguay durante cuatro años- también negó haber participado en los hechos que se le imputan por la privación ilegal de la libertad de Beatriz Recchia, quien se encontraba embarazada de cinco meses y fue secuestrada junto a su hija Juliana Inés García Recchia, y por el homicidio de su pareja, Domingo Antonio García.

Beatriz Recchia permaneció en el centro clandestino de detención "El Campito" que funcionó en Campo de Mayo y durante su cautiverio, en mayo de 1977, dio a luz a una niña quien le fue inmediatamente arrebatada y cuya verdadera identidad recién le fue restituida el 12 de febrero de 2009, después de décadas de una incansable búsqueda encabezada por su hermana Juliana, que sobrevivió al secuestro, y por Abuelas de Plaza de Mayo.

Tras las declaraciones de los imputados, fue citada a declarar Juliana Inés García Recchia, quien hizo un relato de los recuerdos que pudo almacenar a pesar de tener tres años cuando el 12 de enero de 1977 le arrebataron a sus padres y le saquearon todas las pertenencias.

"Viví con ellos 3 años y 13 días. Los hechos traumáticos no se olvidan y éstos los tengo grabados a fuego junto con sus abrazos que me acompañan, porque es lo que me queda de ellos", contó al referirse a sus padres ante el tribunal y a referentes de la Comisión Memoria Verdad y Justicia Zona Norte, Suteba, Abuelas de Plaza de Mayo, Comisión Campo de Mayo, Comisión Memoria de San Martín, entre otros.

Luego repasó el momento del operativo ocurrido el 12 de enero de 1977 en su casa de Villa Adelina, por efectivos del Ejército vestidos de civil que, según su relato, "saquearon todo y sólo dejaron un rollo de papel higiénico". Además, pidió que "Alfonso tenga la valentía de contar la verdad y diga qué hicieron" con su madre y lamentó que por retardos en la justicia "muchos quedarán impunes".

Al momento del proceso, López Fader y Alfonso se encuentran detenidos en la Unidad Penitenciaria 34 de Campo de Mayo. De no mediar una suspensión hasta el martes próximo, está previsto que declare Juana Muñiz Barreto, hija del ex diputado Diego Muñiz Barreto, secuestrado y ahogado luego de haber sido drogado con una inyección el 6 de marzo de 1977.