Ayer fue un día cargado de reuniones, todas con la mirada puesta en revertir el anuncio del cierre del ingenio San Isidro, en la localidad de Campo Santo, que dejaría a 730 trabajadores en la calle. La más relevante fue la que mantuvo el gobernador Juan Manuel Urtubey con los intendentes de Campo Santo, Mario Cuenca; de General Güemes, Alejandra Fernández; el senador departamental Carlos Rosso y el diputado provincial Juan Emilio Fernández Molina. También participaron el vicegobernador Miguel Isa y el ministro de Gobierno, Derechos Humanos y Justicia Marcelo López Arias.

Durante el encuentro, trataron la situación del departamento General Güemes ante el anunciado cierre del ingenio y la destilería San Isidro, y el impacto que ello tendría en la vida económica de la zona. Allí Urtubey indicó que el Gobierno provincial continúa trabajando para que la patronal y los empleados abran instancias de diálogo que impliquen un acuerdo justo.

Por otra parte, se informó que la Secretaría de Trabajo y Empleo provincial acompañará las gestiones que los trabajadores nucleados en el Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio San Isidro (Soeasi), realicen ante el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, en el marco del Procedimiento Preventivo de Crisis de Empresas. “Le indicamos al Gobernador que estamos a disposición de los trabajadores para acompañarlos ante esta difícil situación con las herramientas que nos corresponden como legisladores”, dijo al término del encuentro el senador Rosso.

También hubo numerosas reuniones a nivel gremial. Los dirigentes del Sindicato del Azúcar recibieron el apoyo de varios gremios de la provincia; y ayer al cierre de esta edición dirigentes y trabajadores se encontraban a la espera de las notificaciones oficiales que debía enviar el Ministerio de Trabajo de la Nación.

La voz ausente del debate público, sin embargo, fue la de los representantes de la empresa. La última declaración pública del gerente general de la firma, Carlos Montalvo, se difundió el pasado domingo en el diario El Tribuno. Allí el ejecutivo había tenido expresiones como “los resultados del ingenio simplemente no dan para más”, y había explicado que “el modelo de negocio está muy deprimido por una plataforma que afecta no sólo a San Isidro sino a la industria azucarera argentina”.

Respecto de las acusaciones del sindicato, que aseguró que las ganancias de la empresa eran millonarias, Montalvo expresó que “sería absurdo para cualquier tipo de negocio, en cualquier parte del mundo, una paralización si hubiese un resultado de la magnitud que menciona el sindicato”. Finalmente, y consultado sobre la posibilidad de una venta, el directivo indicó que el grupo peruano Gloria tenía previsto “preservar” tanto las tierras como la planta y las marcas del ingenio. Esta afirmación complica las negociaciones, ya que una acción de ese tipo impide cualquier posibilidad de recuperación del emprendimiento.

La decisión empresarial de cesar sus actividades, motivó que el Gobernador suspenda el viaje agendado a Davos con el presidente Mauricio Macri.

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