Sobre el tema, Gutierrez explicó: "{jkhighlight}Empezamos a recorrer hoy una experiencia que se denomina Presencialidad Cuidada, que todavía no sabemos bien de que se trata, pero iremos aprendiendo en el camino porque supone la organización de los grupos de cada grado bajo el concepto de aula burbuja, focalizar una determinada cantidad de chicos y que sean ellos los que van conociéndose y concurriendo a la escuela de esa manera{/jkhighlight}".

"Esta modalidad nos va a permitir a nosotros, ojalá nunca suceda, pero en caso de detectar un contagio, vamos a tener focalizado el grupo de niños y el de las familias, esperando que las autoridades sanitarias procedan en consecuencia".

Al ser consultado por las expectativas de los niños y niñas, Gutierrez aseguró: "A esta experiencia la tendremos que ir recorriendo todos juntos, docentes, padres y las autoridades también porque no sabemos que cosas están bien, que cosas están mal".

"Esperamos no tener algún contagio porque aquí lo que se pone en juego son las necesidades y las expectativas de los niños, niñas, sus intereses, nosotros también estamos desesperados para que los niños y niñas regresen a la escuela pero no son las mejores condiciones".

Gutierrez también brindó detalles sobre la organización usada en la institución para la implementación del programa 'Presencialidad cuidada': "{jkhighlight}Nosotros dividimos cada grupo en tres burbujas, cada burbuja tiene entre 12 y 13 personas por aula, respetando la idea del distanciamiento social, las aulas están totalmente aireadas con las puertas y las ventanas abiertas{/jkhighlight}".

"{jkhighlight}Los niños cuentan con una disposición espacial, de 1,50mt entre uno y otro pupitre, cada 40 minutos se produce una sanitización del espacio para que vayamos tomando todos los recaudos necesarios a propósito de la época en que vivimos, con esta cuestión de la pandemia{/jkhighlight}".

Por último, también se refirió a los kits sanitarios con los que cuentan tanto los niños y niñas como los docentes: "Estamos poniendo la mirada en cultivar hábitos saludables, por eso cada niño tiene su kit de bioseguridad, cada docente también cuenta uno, desde la institución se prevén todas las medidas necesarias para que ello suceda, porque por ahora debemos aprender a convivir con este virus, es sabido que de ninguna pandemia se salen en 8 o en 10 meses, tampoco salimos con dictar medidas preventivas si no las ponemos en práctica. El desafío es ser coherente entre lo que decimos y hacemos, nos va a costar muchísimo seguro, pero la esperanza siempre está".