Ante un acto multitudinario en Córdoba, ayer, el presidente pidió que lo acompañen el 27 de octubre próximo y prometió que si es reelecto vendrá "una etapa de crecimiento" y "habrá más trabajo", aún cuando durante sus tres años y medio de gestión se profundizó la pobreza y el desempleo.

Al igual que en las movilizaciones anteriores de la caravana del "Sí, se puede", el mandatario evitó hablar del modelo económico que llevó adelante desde que llegó a la Casa Rosada y desembocó en la actual crisis económica. En su lugar, juró que habrá mejoras en la Economía en caso de alcanzar un segundo mandato, en especial para los sectores medios. "No estamos dando vuelta una elección sino una historia de frustración", señaló Macri, junto a la primera dama, Juliana Awada; su compañero de fórmula, Miguel Ángel Pichetto, y el jefe del interbloque de Diputados del oficialismo, Mario Negri.

Con la Plaza Velez Sarsfield repleta, el jefe de Estado se mostró confiado en que mejorará su performance en los comicios del domingo próximo. "Esta marcha maravillosa no termina hoy acá, tenemos una parada más que es el 27 de octubre y el 24 de noviembre", dijo Macri frente a 80 mil personas, según estimaciones de los organizadores del acto.

La elección de Córdoba para cerrar la campaña no sólo obedece a la necesidad de cumplir con la cábala que inauguraron cuatro años atrás, sino también porque en las elecciones generales de 2015 Macri obtuvo en ese distrito el porcentaje de votos más alto, el 53,22 por ciento. En las PASO del 11 de agosto último, alcanzó el 47 por ciento de los votos, sin embargo en el oficialismo están seguros que podrán sumar varios puntos más.

"Vamos por una elección con la mayor asistencia desde 1983", dijo el mandatario entre cánticos de sus seguidores. Y agregó: "Ustedes crearon las marcha del Sí se puede el 24 de agosto y salimos todos a recorrer el país. Ustedes me dijeron que no estaba solo y yo hoy vengo a decirles que no están solos".

"No dejemos que las dificultades nos hagan dudar de las cosas que ya hemos logrado", apuntó Macri. Y redobló la apuesta: "No nos vamos a quedar callados mientras nos roban nuestro futuro. Ya demasiadas veces nos aguantamos el dedito, el atril, la soberbia, la prepotencia. Dejamos un espacio enorme y también intentaron ir por nuestra libertad. Somos una mayoría los que queremos vivir de otra manera". Y concluyó: "Por suerte nos despertamos, queridos cordobeses, y empezamos a levantar la voz y decir hasta acá llegaron".