En primer lugar, destacó la importancia de recomponer el salario de los empleados públicos y tener un plan para que recuperen todo lo que han perdido anteriormente.

Para ello propone un Plan de Reparación Histórica para los empleados estatales, que servirá no sólo para recomponer salarios, generar mayor estabilidad laboral, favorecer la carrera administrativa y la capacitación, y fortalecer los derechos laborales, sino también para movilizar la economía jujeña en la que la masa de salarios de los empleados públicos es un factor fundamental.

En segundo lugar, sostuvo que es necesario cambiar la actitud del gobierno de Jujuy frente al gobierno central de Buenos Aires.

Debemos tener una actitud mucho más digna frente al poder central. A algunos les parece que es un historia nada más, pero para nosotros es una cuestión conceptual: Jujuy ha sido fundadora de la Nación Argentina, por eso es un tema fundamental la relación de la provincia con el gobierno nacional y exigir todo lo que nos corresponde”, manifestó.

Por eso, es esencial que las soluciones a los problemas de Jujuy, se piensen desde Jujuy:

“Tenemos que salir de esta situación con un proyecto autónomo, de Jujuy”, porque “nosotros sabemos cuáles son nuestras necesidades y nuestras potencialidades”.

En tercer lugar, Tecchi propuso poner en marcha el Consejo Económico y Social provincial, un ámbito en el cual la comunidad pueda expresar cuáles son las prioridades, cuáles son las situaciones que necesitan atención con mayor urgencia, tanto en el ámbito social, como económico, empresarial, ambiental, entre otros.

Esta medida intentará generar una mayor participación ciudadana y fomentar la transparencia y la eficiencia en la gestión gubernamental.

Por último, remarcó la necesidad de avanzar en la Legislatura con un proyecto de coparticipación para los municipios, de manera de dotarlos de autonomía financiera, permitiendo de ese modo, su desarrollo.

Tenemos que terminar con la presión sobre los municipios que detiene su desarrollo. Sin una Ley de coparticipación es muy difícil para un intendente planificar. Es fundamental avanzar en la ley para que cada municipio sepa a qué atenerse”.

Así, la propuesta es “un cambio en la actitud del gobierno”, en la que los funcionarios sean verdaderos servidores públicos y atiendan las demandas de la gente.

“Nuestros funcionarios van a ser servidores públicos y, cuando ya no puedan, dejarán de ser funcionarios. Tienen que estar al servicio de la gente, contestar y dar respuesta a los reclamos. Debemos crear un gobierno abierto, democrático y que atienda las necesidades de toda la provincia, de punta a punta”.